Peter hace tiempo me lo venía
diciendo y esta semana he tenido que ceder y contratar una
secretaria.
- Yessi, cariño, cada día estamos mas
mayores -me ha dicho. Tú estás pendiente de una operación de
cataratas y de que te pongan un audífono porque estás mas sorda
que una tapia. Yo, todavía estoy peor que tú. Nuestro becario
lleva varias semanas sin aparecer por casa y Canelo, que es muy
listo, muy bueno y servicial, no deja de ser un perro...
- Y por si fuera poco, ya sabes que
ahora tenemos mucho trabajo que hacer y no vamos a poder con todo
-continuó.
Tenía razón. Así, que desde ayer,
tenemos una secretaria. Se llama Ana Clara, nos la han recomendado
como una gran profesional, muy eficiente y experimentada.
Pero como todo tiene su explicación,
esto también. A raíz de las declaraciones que hizo la Fiscalía
Anticorrupción, los neurólogos, psiquiatras y psicólogos mas
importantes del país empezaron a llamarme, para que me encargase de
organizar un simposio internacional lo antes posible, para estudiar y
debatir el caso de la Infanta Listina y todos los miembros que
componen esa Fiscalía.
Si han pedido que la hija del Rey no
sea imputada en el caso Noós, porque “no sabía lo que firmaba”,
hay que averiguar si está enferma. Si es así, qué clase de
enfermedad tiene o si por el contrario, estaba enajenada, algo fumada
o borracha.
Ana Clara, que nunca imaginó como iba
a ser su primer día de trabajo, comenzó a buscar un sitio donde
celebrar el evento y a mandar invitaciones a diestro y siniestro.
Mientras tanto yo, me puse al habla con el Jefe de los gatos del
Palacio de La Zarzuela, para saber si la Casa Real estaría
dispuesta a colaborar. No soltaron prenda. ¡Miau! No me lo
esperaba de mis colegas.
- ¡Es la hija de los Reyes! -me
dijeron. Nos echarían a todos y vivimos muy bien aquí... ¡Lo
sentimos mucho Yessi!, pero esta vez no te podemos ayudar. No nos
podemos convertir en unos desahuciados...
Llamé a Eduard Punset. Se me ocurrió
que el libro que escribió y en el que cuenta cómo la vida y la
ciencia se funden en una historia emocionante, podría ser la clave
para resolver lo que le pudo pasar a la Infanta. No estaba y dejé
recado para que me llamase a su regreso... Espero que pueda venir, es
muy importante para terminar con la indignación que sienten todos
los españoles...
Por la tarde a nuestra secretaria le
dio un ataque de ansiedad. Fue entonces cuando descubrimos que no
había trabajado tanto en toda su vida. Era una funcionaria de
Ministerios, que había pedido una excedencia porque estaba cansada
de la monotonía de su trabajo y de los recortes de sueldos, de pagas
y de moscosos.
Mientras Ana Clara iba en la
ambulancia de camino al hospital, recibimos una gran noticia: “El
Tribunal Supremo ha confirmado la nulidad de las cláusulas suelo de
las hipotecas”. ¡Miau! ¡Que alegría!. Ya va siendo hora de
empiecen a salir las cosas bien.